¿Qué tipos de excavadoras existen? Las excavadoras son una maquinaria básica en cualquier tipo de obra o construcción. Sus diferentes tipos y modelos permiten realizar una amplia variedad de funciones orientadas a los desplazamientos de tierra y materiales pesados.
Una excavadora cuenta básicamente con una cabina donde se aloja el operario, un brazo y, al final de este, un balde, cubo o cuchara. A la hora de definir los diferentes tipos de excavadoras, se encuentran sobre todo diferencias de carga, tamaño y movilidad.
En función de cada uno de estos modelos, se deducen una serie de usos particulares que exponemos a continuación.
Excavadora estándar de orugas, el tipo más común
Este tipo de excavadora es el primero que nos suele venir a la cabeza cuando pensamos en esta maquinaria. La excavadora de orugas se identifica precisamente por este sistema de movimiento sobre el terreno que le aporta gran tracción.
Debido a esta cualidad, la excavadora de orugas es el modelo ideal para trabajos en terrenos irregulares, con importantes pendientes o lodos, por ejemplo. Esto hace que este tipo de excavadora sea muy habitual en usos como:
- - Nivelación de solares
- - Construcción de zanjas y fosos
- - Minería
- - Agricultura
- - Paisajismo
Frente a estas cualidades, su mayor debilidad se deriva precisamente de este sistema de tracción tan útil, ya que es un mecanismo lento para el desplazamiento de la máquina.
Excavadora con ruedas, perfecta para asfalto
La principal diferencia con la excavadora anterior respecto a la de ruedas es precisamente este sistema de desplazamiento. Las ruedas aportarán ventajas a la excavadora en terrenos lisos como el cemento o asfalto, donde resulta más rápida y eficiente que la anterior. Por el contrario, no es útil para terrenos escarpados.
Por este motivo, la excavadora de ruedas cuenta con un amplio uso en obras sobre un terreno plano o ya asfaltado o cimentado, donde aporta todas sus ventajas de velocidad y manejo, incluyendo capacidad de giro de 360 grados. Además, será muy útil para tareas que requieran una manipulación precisa.
Retroexcavadora, el tipo de excavadora más versátil
Las retroexcavadoras se confunden muy a menudo con las excavadoras de orugas o ruedas, en función del modelo en cuestión. Sin embargo, como su nombre indica, el prefijo “retro-” nos indica que su brazo con su correspondiente pluma o cucharón salen de la parte trasera de la excavadora, y no de la delantera. Además, en este caso nos encontramos con una capacidad giratoria de 200 grados en vez de completa.
Por su parte, la zona de alante de la retroexcavadora tiene alojado un cubo que se utiliza para mover y empujar grandes cantidades de tierra o cualquier otro elemento. Estos 2 usos de las distintas “caras” de la excavadora la convierten en una máquina sumamente útil, con aplicaciones como:
- - Nivelación de terreno.
- - Movimientos de grandes cantidades de material con agilidad.
- - Abrir zanjas en la tierra.
Todo ello sin mencionar las numerosas funciones que adquieren gracias a que tienen la posibilidad de acoplarse a otras herramientas de trabajo.
Miniexcavadora, una máquina compacta de múltiples usos
Como es fácil de imaginar, en el caso de la miniexcavadora hablamos de un tipo de excavadora que se diferencia por su menor tamaño. Esto posee tanto ventajas como desventajas, que la vuelven útil para determinadas situaciones.
Por un lado, como es natural, cuenta con una menor potencia, que hace que excaven a menor profundidad. Por otro lado, es más fácil de manejar y se adapta perfectamente a espacios compactos en los que las grandes excavadoras serían inútiles. Además, se desplaza habitualmente mediante orugas, lo que también la vuelve apta para terrenos irregulares.
Gracias a estas características, las miniexcavadoras se usan sobre todo en obras con espacios estrechos y con limitaciones.
Palas hidráulicas, el tipo de excavadora más potente
La llamada pala o excavadora hidráulica es un tipo de excavadora enfocada a tareas que requieren una gran potencia mecánica. Se distinguen de otras variedades por su imponente tamaño, que incluye un gran brazo con su correspondiente cucharón que permite excavar y transportar materiales muy pesados, como rocas o minerales. Este cubo puede tener distintas orientaciones y gran capacidad.
Su gran potencia y tamaño la vuelven ideal para usarse en labores como la minería, además de que sus accesorios la habilitan para romper materiales como cemento, acero o taladrar agujeros, sin embargo este mismo tamaño descomunal la puede volver excesiva para según qué obras.
Dragas, el tipo de excavadora anfibio
Si alguna vez has visto una excavadora instalada en una plataforma para trabajar en el agua, seguramente te hayas encontrado con una draga. Esta máquina puede estar tanto en tierra como sobre una embarcación y como es de esperar se utilizan para excavar bajo el agua y sacar dichos materiales a la superficie.
La más habitual es la draga con cubo o cucharón, que, si bien puede parecerse a una excavadora estándar, funciona con otro sistema para poder elevar y bajar la cuchara a una profundidad que puede exceder los 60 metros. Debido a esta particular conformación, este tipo de excavadora se usa en aplicaciones como:
- - Construcción de canales, puentes o puertos
- - Minería
- - Cualquier proyecto de excavación que exija una gran profundidad.
Al tener un funcionamiento y orientación tan específica, sin mencionar su gran tamaño, las dragas no se encuentran entre las excavadoras más versátiles.
Excavadora de largo alcance, para áreas de difícil acceso
El último tipo de excavadora en que nos vamos a detener es la de largo alcance. Su objetivo es poder cubrir mayores distancias gracias a su brazo, por lo que este es su signo distintivo: tanto la pluma como el brazo son notablemente más alargados que los de una excavadora estándar, pudiendo llegar a los 30 metros.
Este brazo es de gran utilidad cuando, debido a las características del terreno o de la obra, es difícil acceder a la zona a excavar trabajar. Por eso, en este caso el principal uso de este tipo de excavadora irá en función de la dificultad de acceso al material, por lo que suelen utilizarse para retirar material de demoliciones, por ejemplo.